Lengua 2.0

Cuenta Lourdes en su blog que la Fundación del Español Urgente ha puesto en marcha Wikilengua, todavía en periodo de pruebas pero con la intención de lanzarlo en septiembre.

La Wikilengua es un recurso para el mejor uso del castellano, donde se pueden consultar, con una orientación esencialmente práctica, dudas frecuentes y que se puede ir extendiendo y corrigiendo con la colaboración de la propia comunidad.
La Wikilengua funciona como una comunidad en la que pueden participar autores, traductores, editores, lingüistas, correctores, profesores, periodistas y en general todas las personas interesadas en la lengua.
Al estar abierta y accesible a personas de todo el mundo, la Wikilengua puede ser también un medio para reflejar la diversidad y la riqueza del español en sus múltiples variantes habladas en más de una veintena de países.


Y lo que pasa con estas cosas, que un enlace te lleva a otro y a otro... Y buceando un poco en la Web de FUNDÉU descubro otros recursos interesantes: Como Vademécum basado en el Maunal del Español Urgente que edita Cátedra y con términos que se actualizan todos los días.
O la interesante revista Donde Dice... preparada en formato PDF para su descarga gratuita.
O la sección de Dichos y refranes donde encuentro la explicación a algo muy relacionado con esta época:

A la bartola (echarse, tumbarse, tenderse)

Dícese del que se despreocupa y descuida cualquier actividad.

Aparece como locución en el diccionario de la Real Academia Española de 1852 con el significado de: «sin ningún cuidado» y la recomendación de su uso con los verbos echarse y tenderse y a partir de la edición de 1983 se amplía su definición a:«Con los verbos echarse, tenderse, tumbarse, descuidar o abandonar el trabajo u otra actividad. Despreocuparse, quedar libre de toda inquietud.»
En el Diccionario Histórico de 1936 encontramos el término bartola con el significado de: barriga, vientre. Voz atribuida al nombre de Bartolomeo/Bartolomé/Bartolo cuya festividad se celebraba el 24 de agosto, al final de la cosecha, lo que contribuía a que se asociaran la finalización de las tareas de la recolección y los merecidos descanso y fiesta posteriores.
Ref. Dichos y frases hechas, de J. Calles Vales y B. Bermejo Meléndez.

O con los tres años de vida de nuestro blog:

A la tercera, va la vencida/La tercera es la vencida

Dícese para dar a entender que la repetición moderada de cualquier intento es necesaria, bien para conseguir algo o bien para desistir de ello.

A tres va la vencida aparece recogido en la primera edición del Diccionario de la Real Academia Española (1739) como: «Phrase, con que se aconseja a alguno, que no desista del intento, que tiene, por no haberle conseguido con los primeros medios, que había tomado, pero que no sea tan terca la porfía, que llegue a ser excesso». En la edición de 1869 incorpora las variables de A las tres… y A la tercera… y en la actual también puede leerse A la de tres…
El origen no es claro y su explicación más aceptada parece relacionarse con el juego o el deporte en los que la jugada o la clasificación podía conseguirse en tres intentos. No obstante, hay autores que se remontan a la disposición por filas de las legiones romanas en situación de combate en la que la tercera fila, protegida por las dos primeras que soportaban el primer choque, era con frecuencia la decisiva en el desenlace de la batalla.
Ref. El porqué de los dichos, de José M.ª Iribarren y Tres mil historias, de Héctor Zimmerman

2 comentarios:

Lourdes Domenech dijo...

Tu post-eco es completísimo.
Mi entrada era sólo una manera de captar la noticia y poderla tener a mano para cuando la necesitara.

Saludos

Antonio Alonso dijo...

Gracias Lu, pero tú captas la noticia, nuestra atención y pones el recurso en nuestras manos ¿ Qué más se puede pedir?